Este Vía Crucis ha sido predicado por el Obispo Claudio Gatti en Lourdes el 12 de octubre de 1991 con ocasión de una peregrinación efectuada con algunos miembros de la comunidad. En la misma circunstancia y exactamente el 14 de octubre de 1991 Marisa comenzó a escribir "bajo dictado" la vida de la Madre de la Eucaristía.
Texto elaborado por el Obispo Claudio Gatti
Esta novena ha sido compuesta en un momento de particular sufrimiento en nuestra vida. Habíamos tenido siempre una gran amor y una particular predilección hacia San José; el uno y la otra nos habían sido transmitidos por la Virgen. La esposa purísima ha expresado su agradecimiento por esta novena en honor de su castísimo esposo y ha manifestado el deseo de que fuese publicada antes que su vida, para hacer conocer y amar a aquel que ha tenido el privilegio y la responsabilidad de ser llamado "padre" del Hijo de Dios. El mismo San José, ha manifestado su agradecimiento como resultado de su mensaje del 19 de marzo de 1994.
Texto elaborado por el Obispo Claudio Gatti
Esta oración ha sido recitada por el Obispo Claudio Gatti el 5 de agosto del 2007 mientras, junto a la Vidente y a algunos jóvenes, se estaba preparando para la aparición de la Madre de la Eucaristía. Ha dejado hablar a su corazón, traspasado por el sufrimiento, y a su alma, lacerada por el dolor al ver la Iglesia de Cristo malversada y devastada por los que, sin embargo, la deberían defender y custodiar. Nuestra Señora ha querido que esta oración, formulada oralmente por el Obispo, fuese puesta por escrito, difundida y recitada por los miembros de nuestra comunidad y por los Cristianos que aman la Iglesia y oran y sufren por su renacimiento y por su triunfo.
Texto elaborado por el Obispo Claudio Gatti
(1) Comprometieres a respetar los Mandamientos de Dios y los preceptos de la Iglesia.
(2) Atender diariamente a la Santa Misa, si es posible, y recibir la Sagrada Comunión o visitar a Jesús ante el Santísimo Sacramento o hacer en casa una Comunión espiritual.
(3) Recurrir a la Santa Confesión de manera regular e inmediatamente si hay necesidad.
(4) Leer y conocer la Palabra de Dios, cuando menos los Evangelios.
Esta novena ha sido compuesta por el Obispo Claudio Gatti, para la preparación de la fiesta de la Inmaculada Concepción del año 2000, con un carácter de estudio, de reflexión y de oración. Por tal motivo, nuestro Obispo nos ha guiado en la lectura del capítulo VIII de la Constitución Lumen Gentium del Concilio Vaticano II, que explica la figura y la misión de la Virgen. De este modo, el Obispo ha querido que al conocimiento de la Palabra y de las cartas de Dios, se pudiese añadir un conocimiento, al menos parcial, de los documentos principales de la Iglesia.
" He venido para la clausura de la novena y he oído todas las palabras que ha dicho el sacerdote. El os ha hecho conocer y amar más a María, a José y al pequeño Jesús, y ha hecho sobresalir a Isabel y Zacarías, los personajes que en estos días aparecen más en el recuento evangélico. La Madre os da las gracias por lo que habéis hecho durante esta santa novena: oraciones, sacrificios, florilegios y ayunos " (Carta de Dios 23 diciembre 1998).
Oración a Dios para el Obispo ordenado por Dios y para la Vidente
Dios, Padre de todos los hombres Tu, que eres infinito amor y suma verdad, atiende nuestra oración. A ti, dirige su mirada confiado el mísero, a Ti se dirigen la viuda y el huérfano para alcanzar justicia. Tu, que proteges a los débiles y a los últimos, atiende nuestra súplica, vuelve Tu mirada hacia esta comunidad que implora Tu gracia y Tu ayuda.
Esta oración ha sido aprobada por S.E. Mons. Claudio Gatti